BENITO POR LAS UROPAS
Resulta
que este es el año de nuestro Señor en que cumplo las cinco décadas y a un
amigo de casi toda la vida se le ocurre cagarme la vida regalándome un viaje a
Francia. Siendo el mes de marzo, me hago el difícil y respondo
"Rotundamente NO".
Tras
pensarlo unos días, y habiendo consultado con el financista local que iba a
proveerme de los garbanzos para la aventura, decido replantear el asunto y
cambio la respuesta para un "si".
Acá, ya
resuelto, recuerdo una vieja promesa hecha a una figurita difícil y pienso: ¿Qué
hago? ¿Le digo o no le digo? La última vez que hablamos por teléfono me atendió
como si tuviera ébola... Ma sí, yo la llamo. Mañana la llamo, no, mejor pasado.
Y así fueron pasando los días hasta que me convencí de que "seguro que me
va a decir que no" y entonces, con estos sólidos argumentos, no llamé a
nadie.
Me voy
sólo, que joder!
Trámite
rápido, sacar el pasaporte hoy es una huevada, a los diez días lo tenía en casa
y hasta la Assist Card en orden.
Cazo el
google maps y empiezo a ver qué CARAJO HAGO EN EUROPA TRES SEMANAS?????? Y
decidí un tour que empezaría en Paris, seguiría en Londres, continuaría en
Dublín para ir a Belfast y de allí París nuevamente con rumbo ferroviario a
Cannes, Niza y Mónaco.
Cazo el
Booking.com y empiezo a reservar hosteles a lo tonto, lo más toraba posible y
cerca del subte para poder moverme medianamente bien. La agenda incluía visitar
todo lo posible de valor histórico y lo menos posible de valor artístico, ya
que si en Baires con el suplemento Cultura limpio la Parrilla, no tenía mucho
sentido visitar el Louvre, aunque lo intenté y desistí debajo de la pirámide de
vidrio (a cuyo autor intelectual y material habría que cagar a tiros por poner
semejante basura justo en ese lugar. L hubieran puesto en La Defense y hasta
hacía juego.
Ahora,
faltaba lo importante. Decidí que era mejor estirar la estadía que comer
decentemente, con lo cual reduje la ingesta de calorías a un desayuno
"Café au lait" fuera del hostel y un ó almuerzo frugal o cena frugal,
no ambos, pues había un dolor de huevos infranqueable: fumar cuesta una
fortuna. 6 Euros un Gauloises sans filtre pedorro ¿ Por qué no me llevé dos
cartones de Parisiennes? Un boludo.
Basta por
hoy. Arranco en breve con el vuelo infumable de 12 horas con escala en San
Pablo.
EZEIZA:
Llegó el
momento de la partida, saludo rápidamente a quien me había acercado hasta allí
y me mando a hacer el check in. Con los nervios del caso, ya que no hay mas
pasajes, solo llevaba una hojita A4 impresa en casa que decía que YO tenía ida
y vuelta a París. Bueno, la cosa es que funcionó y me subí al avión de TAM
rumbo a la escala de dos horitas en San Pablo. Al arribo al aeropuerto
internacional de San Pablo me agarró una sensación de haber viajado al pasado.
Es un aeropuerto recontra choto para ser vísperas del Mundial!!!!. Me hizo
recordar al viejo Ezeiza de 1980 mas o menos, y con bastante mugre por todos
lados.
Hecha la
escala de rigor, ahora sí vuelvo al avión de TAM, pero rumbo a París. Casi 10
horas más sin fumar, un embole épico. Me vi dos películas, dormité mal, me
cague de frío, pero finalmente venía de arriba, así que ajo y agua. Ahora
comprendo a la gente que le embolan los viajes. Estar encerrado en un cacharro
10 horas (que mentalmente son 20) es un tremendo embole. Volar no me da miedo,
me recontra embola. Hasta pensé en un atentado y que se caiga el avión a la
mierda, pero que termine YA, por Dios!
La cosa
es que llego finalmente al Charles De Gaulle, y así, medio de mal humor por el
viaje, no te vas dando cuenta, pero de golpe, estás en la calle, no sabes bien
para donde rumbear y ¿Qué Carajo hago en París? Opté por seguir al rebaño y me
encontré en un tren que te deja en alguno de los Metro. Yo sabía que tenía que
ir a la estación Gambetá de uno de los Metro y me mandé. Y aunque parezca
increíble, llegué. De ahí caminando seis cuadras, llego al primer hostel.
Nada del
otro mundo, me atiende un argelino que solo habla francés, así que por señas le
hago entender que yo tenía una reserva ahí. Los muy putos de Booking no avisan
que el hospedaje era barato porque tiene 6 pisos sin ascensor, pero como yo
hice la Colimba, me la recontra banqué como un duque.
Revolié a
la mierda el equipaje en la habitación, volví a bajar a la calle desesperado
por comprar fasos y algo para cenar, pues ya se venía la noche. Recién ahí me
di cuenta que hacía un frio de cagarse, pleno mayo, en Francia. Me pregunto
¿pero la puta madre, no es primavera acá? Bueno, no sé que merda pasó, pero mi
estadía total fue un cagadero de frío. Gasté 6 euros en fasos (un atado) y 6
euros en cenar (después describiré lo que cenaba) y me guardé en el hotel a
torrar porque ya eran como las 8 de la noche y venía re fusilado. Mañana a
primera hora, subte, buscar la estación Trocadero y tocar la Torre Eiffel, y
después veríamos que seguía.
VISTA DE A TORRE EIFFEL DESDE TROCADERO
VISTA DE PARIS DESDE LA PRIMER PLATAFORMA DE LA TORRE EIFFEL
Día dos
en Paris:
Duermo
como los dioses, me asombra lo bien que se ve el TV LED sin cable, solo con una
antenita pedorra. Debe ser algo como la TDA que hay acá, no como esas viejas
antenas que había que orientar.
Parto
raudamente del hostel, me clavo un Café au Lait en Mac Donalds, que es tan
choto como acá pero más rápido, tomo el subte en Gambetá (mi estación origen y
destino) y de camino al subte descubro que estoy a cinco cuadras del Cementerio
de Pére Lachaise, donde entre otros famosos, está enterrado Oscar Wilde y
estuvo hasta su repatriación Juan B. Alberdi. Algún historiador lo compara con
la Recoleta, pero la Recoleta es mucho más chico y mucho mas fastuoso. En
Recoleta se gastó guita grossa. Me lo agendo para una futura visita y tomo el
subte hacia Trocadero.
Al bajar
en la estación del subte, empiezo a sentir una sensación rara, basta subir las
escaleras, pegar un giro en redondo y estaré a metros de la Torre Eiffel. Años
soñando este momento y estoy a dos minutos de verla en vivo y en directo. Y así
fue nomás. Ahí me cayó la ficha que estaba en la tierra de mis ancestros y que
soy uno de los pocos que volvió a Francia. Y medio que se me hizo un nudo en la
garganta. Y le enfilé directo nomás, a sacudirme unas cuantas sensaciones
haciendo contacto físico, no era cuestión de verla nomás. Hay que tocarla.
Fue mi
primer contacto con la realidad del turista. Para todo hay cola y todo se
garpa. Imposible llegar a la punta porque está cerrada por refacciones, así que
solo el primer nivel, donde hago una fotos.
Asombrosa
la cantidad de gente, mas asombrosa la cantidad de residentes extranjeros e
increíble la cantidad de negros que hay.
Cumplo el
trámite y me rajo para Les Invalides, donde está la tumba de Napoleón además de
ser un Hospital, originalmente para heridos en las guerras. Asombra ver el
tamaño de los espacios verdes y asombra más ver que a pesar de estar lleno de
autos, no hay bocinas ni aglomeraciones. Mucha bicicleta pública (y garpa),
poca contaminación visual, un empedrado envidiable y sin cráteres y un cierto
aire a Buenos Aires, excepto porque París está limpio y Buenos Aires es una
mugre por todos lados.
No veo
aguas servidas en los cordones ni salidas pluviales. Todos los cordones de las
veredas están secos. Se ve que no baldean. Tampoco hay aires acondicionados
colgados de balcones y frentes, una ciudad prolija
Cementerio de Pere Lachaise |
Ubicación de las sepulturas mas relevantes, Acá fué sepultado hasta ser repatriado, Juan B. Alberdi. |
Calle interior de Pere Lachaise |
Otra vista de Pere Lachaise |
Sepultura clásica |
Cenotafios y sepulturas, bastante descuidadas |
El reflejo del Blindex no permite ver, pero es la tumba de Oscar Wilde, Irlandés expatriado por homosexual de su país y sepultado en Paris. |
El
blindex, me enteré en Buenos Aires viendo fotos, fue colocado luego de limpiar
la sepultura, pues parece que era costumbre hasta hace poco, dejarle marcados
los labios con rouge, y estaba quedando un asco. Lo han limpiado y protegido
con el vidrio para evitar los desmanes de las locas que besuqueaban la tumba.
Así estaba antes la tumba de Wilde antes de protegerla con el Blindex |
OTROS FAMOSOS EN PERE LACHAISE:
Tumbra de Chopin |
Sepulcro de Jim Morrison |
Sepultura de Sraha Bernhardt |
Sepultura de Victor Noir |
SEPULCRO DEFINITIVO DE NAPOLEON REPATRIADO DE SANTA ELENA
UNA DE LAS ENTRADAS A LES INVALIDES
Hora de visitar la Defense y ver la parte moderna de París. Me tomo el Metro hasta Defense y me bajo, viendo de entrada nomás el Grand Arc. El Grand Arc viene a ser un moderno arco del triunfo enlas afueras de París, y es en realidad un Edificio Público. Como todo los visto hasta ahora, está en refacción (en la foto se observa un andamio tubular del piso al techo. Es enorme y alguna cagada se han mandado, puesto que si bien no se aprecia en la base, hay una suerta de biombos hechos de vidrio Blindex, para parar un poco el viento. Semejante estructura y su forma, hace un túnel de viento perfecto. Si te quedás en el hall debajo del Grand Arc, te lleva el viento. Una suerte de recordatorio de las Playas Argentinas, donde puede hacer 35 grados de calor, pleno sol, pero corre un viento huracanado que te lleva la sombrilla y a los pibes si no los atás.
Esta zona
de París tiene alguna remembranza con Puerto Madero (excepto el agua), ya que
la mayoría de la edificación es modernosa y no tiene nada que ver con el centro
de París.
Hecha la
visita, tomo de nuevo el subte y me bajo en la Estación Argentine, para visitar
una calle de París que lleva mi apellido, a dos cuadras del Arco de Triunfo (el
de verdad).
Casualmente,
las estación del Metro se llama Argentine y está decorada con murales de fotos
de nuestro país, destacándose las colitas de las ballenas de Puerto Madryn, las
Cataratas y Calafate. Realmente, un verdadero e inmerecido homenaje a nuestro
país, que no ha sido retribuido hasta donde yo sé. Está bien que tienen
estaciones del Metro para cagarse, pero no esperaba tanta gentileza hacia este
país de bárbaros de parte de los franceses.
Estacion del Metro "Argentine" |
Entrada a Estacion Argentine |
Paso por
“mi calle”, y me voy caminando por Champs Elysees hasta el Arco de Triunfo.
Primer problema: Está en una rotonda, la rotonda está totalmente vallada. La
alternativa de cruzar corriendo queda descartada por el tráfico, mi edad y mi
pésimo estado físico para saltar una valla cual barrabrava en un partido. No
obviemos el hecho de quedar como un pelotudo arrollado por un bondi.
El Arc du Triomphe, el de verdad |
Pero,
veo gente ahí en el Arco. ¿Cómo mierda llegaron? Si no hay semáforos ni sendas
peatonales. Ahí, se me hace un click neuronal y pienso “Debe haber un túnel” y
empiezo a recorrer la periferia del arco con mirada “no me vas a cagar” y sí,
de pronto veo surgir de la vereda una entrada hacia el arco de Triunfo que cruza
toda la calle por debajo y te deja en una de las patas del Arco. Se ve inmenso al tenerlo tan cerca y se nota
por las inscripciones de batallas que los Franceses se han cagado a tiros y
sablazos con medio planeta por la cantidad de batallas y nombres ahí tallados,
cosa que de lejos no se destaca, pero si a 10 metros.
Acceso subterrano a la rotonda del Arco de Triunfo |
Me camino
todos los Champs Elysees, paso por Tulleries (todo en obra, se ve que la crisis
pega fuerte y arreglan todo para mantener a la negrada ocupada), paso las
Grandes Marcas y la Chicas también. En una misma avenida conviven Louis
Vuitton, Cartier con Nespresso, La Brioche Doreé, Zara, H&M, Mac Donalds y
GAP. La Biblia y el Calefón.
Y llego
al Louvre con toda la intención de ingresar. Big mistake, tenés que ir temprano
y ya eran más de las dos de la tarde. Igual me mando. Puteo al arquitecto del
orto que hizo esa pirámide de mierda de vidrio, y me mando al subsuelo a sacar
entrada. Carajo, un cagadero de calor. En la calle hacía 14 grados máximo, y
acá hacía como 36 mínimo y yo con polar que me lo meto sabes donde… Veo las filas y la demora era de 40 minutos.
Entre el calor y la mufa que tenía encima, me empiezo a sentir mal. Empiezo a
transpirar y sentir náuseas. ¿Qué hago? ¿Me desmayo acá o en la vereda? Decido
salir a tomar aire y reponerme, y volver mañana o pasado con más tiempo.
Me vuelvo
cantando bajito, vamos a ver qué cenamos. Estaba filtrado de caminar, pero de
vuelta me mando para el Cementerio de Pere Lachaise, a ver qué onda, y al menos
estaba al aire libre.
Aunque a
decir verdad, yo estaba cagado de frío.
Mañana
veremos de ir al Palacio de Versalles y por la tarde, Dios dirá. Notre Dame,
Sacre Coeur, Ille de France, recorrer el Sena y lo que de el tiempo pues pasado
parto para Londres vía Eurotunnel, desde Gare du Nord. Además, dentro de unos
días vuelvo, después de Londres, Dublín y Belfast.
Retomando
el tema de la comida, como ya comenté no iba a hacer las cuatro comidas
diarias, solo desayuno y cena. El desayuno lo resolvía en Starbucks o Mac
Donalds, que además tienen wi fi gratarola ilimitado, y la cena era a lo Bear
Grylls. Comería lo que cazaba o recolectaba.
Esto
último, y con algo de conocimiento básico de supervivencia Scout, tenía la
información que podés vivir decentemente comiendo avellanas, pasas de uva,
nueces y almendras y mechando de tanto en tanto con un chegusán de esos
envasados y agua de litro y medio la más barata. Resultó bien, pues no me morí,
solo perdí unos 6 kilos en tres semanas, y la verdad, no pase hambre. Comer no
es mi prioridad, y menos estando en un viaje único.
Centro Pompidou |
Sacre Coeur |
Sacre Coeur |
Baño Publico funciona con monedas de 1 euro |
Estacion de Metro Pelleport. A 50 metros del Hostel, había que bajar 4 pisos por escalera |
Cartel a la salida de Notre Dame |
VERSALLES
Todo es
el lujo esperado, gracias a Dios fui temprano. La visita me llevó 4 horas y
había cuando salí unas 5000 personas esperando entrar. La juntan en pala con
eso de cobrarle a todos, pero el lugar es un lujete de la hostia. Los jardines
son sencillamente incomparables. Tal vez, lejanamente, parecidos al Bosque de Palermo
en sus épocas de gloria, pero mucho mejor cuidado. Y también, en obra. Medio
que te arrean por adentro dada la cantidad de gente, pero al final te pudrís de
tanto lujo y cuando llegas a la Galería de los Espejos, te acordás de la
publicidad del perfume. Tenían guita los reyes, eh? Solamente lo que gastarían
en CIF y Glo Coat sería una fortuna por semana. Yo esperaba ese olor a humedad
típico de los museos con porquerías viejas, pero la verdad, nada que ver.
Obviamente,
visité todos los lugares que hay que visitar y hasta hice un paseo en lancha
por el Sena, que resultó un tremendo embole, porque al nivel del Río no ves un
sorongo de lo que pasa en la costanera. Me asombró lo correntoso y el caudal
que tiene ese rio.
EUROTUNNEL Y LONDRES
Finalizada
la primera parte de París, a donde volvería en unos 10 días, me tomo el Metro a
Gare du Nord, donde me tomo el EUROSTAR hacia London. Seguridad similar a un
aeropuerto, 180 euros el pasaje de IDA, es más barato ir en avión. Te fumás del
lado del continente unas dos horitas o más de tren hasta el túnel y luego
dentro del túnel te da lo mismo si estás en el Túnel del Libertador, el del
Cristo Redentor o cualquiera sea, ya que no se ve nada. A los 40 minutos más o
menos de Túnel, te deja en Saint Pancras International, pleno centro de
Londres. Ahí yo sabía que tenía que ir al hostel cerca de la estación del
Subway "Manor House" y caminar unas cuadritas. Llego al hostel sin
problemas, y puedo catalogarlo como el mejor hospedaje barato de mi breve gira.
Buena habitación, iluminada, Planta Baja (venía de los 6 pisos por
escalera,,,), acceso a cualquier hora y salida a cualquier hora, nadie te rompe
las bolas y tenía jardín donde cocinar, fumar y hacer amistad. Me pase
dos horas charlando con un British borracho, obviamente, hablamos únicamente de
Messi y de las Malvinas, y la verdad, eso de que los ingleses pronuncian bien,
es cuento. Yo le entendía poco y nada. Jodido hablar sin separar los dientes o
modular, pero bué, que tampoco nos íbamos a casar, no? El lugar era en las
afueras de Londres, barrio de Judíos, Hindúes y Negros variopintos, nadie te
jode. Esa noche me clavé una pizza en Domino´s Pizza y a apoliyar. Mañana me
tocaba el tour por London.
LONDRES
Me
levanto temprano, con la necbuc bajo el brazo y parto raudamente en busca de un
Coffe & Milk cerca de Manor House que tenga guai fai, para organizar la
mañana. Decido encarar para el lado del Tower Bridge y de paso ver el edificio
de Norman Foster, el llamado "Pepino", la torre, el famoso puente de
la torre y recorrer la orilla del Thames River. Ahí decido que es mejor el City
Tour, porque es más rápido, te explican en castellano y después del vistazo a
vuelo de pájaro, volvés donde querés. El garca que me vende el pasaje para el
City Tour es un Hindú con toalla en la cabeza, cuya pinta de garca lo delataba.
Le compro fasos y el pasaje, total 30 Euros, para un cititur de todo el día de
hoy y mañana. Obviamente, el pasaje era más barato si se lo comprabas al del
bondi y encima lo pagabas con tarjeta, cosa que yo ya había hecho en efectivo.
Sacar los Isabel me costaba lágrimas, pero bueno, ya me habían garcado. Me
ubique donde pude, 6 cuadras después de donde le garca del hindú me dijo
"para ahí, posta, posta", la cuestión que cuatro bondis vacíos me
pasaron como alambre caído. Subí a la parta descubierta, por supuesto me
recontra cague de frío, pero pasamos por los lugares más relevantes de Londres
a unos 100 kilómetros por hora, cosa que en dos horas estaba en el mismo lugar
donde había subido, para ahora ir a pie donde YO quería ir.
El Pepino, uno de los ultimos edificios del Arq. Norman Foster |
Vista del Tower Bridge |
Y si, allá también está |
Tenía
entonces lo que quedaban de los tres días de estadía en Londres, el hostel era
mucho mejor que el de París, así que me mande a recorrer la citi. Londres
muchas veces se confunde con Westminster, que es el barrio cercano, donde la
frontera es un monumento en medio de la calle con un dragón. De un lado es
Londres, y del otro Westminster, como se aclara en los carteles de las calles.
Lady Di, en Madame Tussauds |
Freddy, tambien en cera. |
En el conocido Museo |
Varias
veces me sucedieron cosas que en Buenos Aires manejo de otra forma, como por
ejemplo, el mangueo compulsivo de fasos. Acá nunca tengo para nadie. Pero en
Europa, te manguea puchos cualquiera. Gente de traje, mujeres bien plantadas.
No cabezas, sino gente como uno. Se ve que son caros los fasos, ero es raro ver
a una mina pedirte un pucho y verla fumarse un Gauloise sans filtre, de tabaco
negro, como si fuera un Marlboro Light. Otra cosa extraña, por los prejuicios
que uno lleva arraigados, es encontrarse con argentinos. Yo iba solo, con lo
cual no hablaba con nadie, menos en castellano o argentino. Pero claramente
identificaba a los argentos viajeros por lo estridentes de sus griteríos y
obviamente, el acento del Plata. Primero los semblanteaba, si veía que no eran
truchos que me iban a mangar euros para la estadía, les hablaba. A muchos los
sorprendí cuando le mandaba un "De donde sos?" en porteño. Y ahí uno
nota que está en otro país. Se daba la charla, todos puteando al gobierno pero
viajando con el subsidio del Dólar Cretina en la tarjeta. Que se yo, estampas
porteñas en Londres, París, o Belfast.
Debajo de los carteles de las calles, podes apreciar que Londres y Westminster son dos lugares diferentes, muchas veces confundidos |
La rotonda del Picadero, o Piccadilly Circus. |
Torre de Nelson |
Entrada a los palacios de Buckingham |
No me abrieron. El truco de que era de los Testigos de Jeohová no funcionó |
Paralamento Britanico y torre del Reloj |
Una cosa impresentable, pero bueno, ya la pusieron |
Una
mañana, en la que salí como todos los días a desayunar, una mujer grande, unos
años mayor que yo, me preguntó si podía sentarse a mi mesa. Resultó una mujer
muy agradable, ahí me di cuenta que era domingo, la mujer iba a su iglesia y
además de ser bastante amigable, me regaló dos libros religiosos. Disfruté de
esa pequeña charla, de dos desconocidos de ligares totalmente distintos. Y de
paso, me di cuenta que eso de estar mudo por días, hacía que me quedara afónico
a las pocas palabras. Una mezcla de faso y cuerdas vocales endurecidas por
falta de uso.
El lugar donde paraba para dormir, si bien era cercano al subte, era cerca de Manchester, un barrio de trabajadores, casas bajas, en las afueras de Londres. Me hizo acordar, salvando las distancias, a Ramos Mejía del lado de las casas. Solo que acá donde hacemos una casa, allá meten diez o doce. Ventajas de tener un país grande.
El lugar donde paraba para dormir, si bien era cercano al subte, era cerca de Manchester, un barrio de trabajadores, casas bajas, en las afueras de Londres. Me hizo acordar, salvando las distancias, a Ramos Mejía del lado de las casas. Solo que acá donde hacemos una casa, allá meten diez o doce. Ventajas de tener un país grande.
Contenedores a Lo Macri en la afueras de Londres |
Tipicos bondis ingleses |
Tipicas cabinas, tipicamente abandonadas, ya nadie las usa |
Decime si no es la estación Caballito del FFCC Oeste? |
Mucho mas
no hay para contar de Londres, porque la visita era de tres días. Traté de ver
lo de mayor interés dado el corto tiempo, no me hice lugar para el Museo
Británico, que entendía llevaba todo un día su recorrido. Fui a comprar mi
pasaje en tren hasta la costa, a Holyhead, donde me iba a tomar el Ferry
a Dublín. Este fue un trayecto impecable, todo coordinado a lo british, salió
exactamente como estaba planeado. La sigo en Dublín.
DUBLIN
El Ferry me deja en pleno puerto de Dublín, que es como si te dejaran en la Isla Demarchi y de ahí tenés que llegar al Obelisco, obviamente sin guai fai para la lactoc. Aplico la ya conocida experiencia de seguir al rebaño que tan buen resultado me dio hasta acá y me subo a un bondi donde se subían todos. Ahí tomo contacto con que los carteles están en inglés y otro idioma, que luego me entero es Galés o Gaélico o algo por el estilo. Una suerte de catalán, pero inglés, que al igual que el Catalán, es Chino. Primer controversia con el bondilero. Según él una Libra Esterlina "es lo mismo" que un euro, pero en Inglaterra, no te agarran un euro ni con orden del Juez. El pasaje salía un euro, y me cobró una libra, que oh casualidad, separó del resto de los euros que le daban los conocedores y se la guardó él, reemplazándola por un euro. Se ve que peronistas y garcas hay en todo el mundo.
La cuestión es que el Bondi, medio de pedo, me deja en la terminal de los trenes y bondis de Dublín, y me bajo. De puro ojete, pues el bondi seguía andá a saber donde, estoy a unas 8 cuadras del hotel, al que llego cruzando por un puente el Rio Liffey y del cual estaba a 100 metros.
El hostel bastante decente, lo cual resulta siempre una grata sorpresa, pero no tenía una sola percha, ni un solo estante, así que ahí gitaneamos un par de días.
DUBLIN
El Ferry me deja en pleno puerto de Dublín, que es como si te dejaran en la Isla Demarchi y de ahí tenés que llegar al Obelisco, obviamente sin guai fai para la lactoc. Aplico la ya conocida experiencia de seguir al rebaño que tan buen resultado me dio hasta acá y me subo a un bondi donde se subían todos. Ahí tomo contacto con que los carteles están en inglés y otro idioma, que luego me entero es Galés o Gaélico o algo por el estilo. Una suerte de catalán, pero inglés, que al igual que el Catalán, es Chino. Primer controversia con el bondilero. Según él una Libra Esterlina "es lo mismo" que un euro, pero en Inglaterra, no te agarran un euro ni con orden del Juez. El pasaje salía un euro, y me cobró una libra, que oh casualidad, separó del resto de los euros que le daban los conocedores y se la guardó él, reemplazándola por un euro. Se ve que peronistas y garcas hay en todo el mundo.
La cuestión es que el Bondi, medio de pedo, me deja en la terminal de los trenes y bondis de Dublín, y me bajo. De puro ojete, pues el bondi seguía andá a saber donde, estoy a unas 8 cuadras del hotel, al que llego cruzando por un puente el Rio Liffey y del cual estaba a 100 metros.
El hostel bastante decente, lo cual resulta siempre una grata sorpresa, pero no tenía una sola percha, ni un solo estante, así que ahí gitaneamos un par de días.
Un vehículo para gente con personalidad |
Revoleo
el equipaje y salgo a hacer la recorrida habitual, viendo de donde sale el
citytur en Bondi, y luego recorriendo todo a pata de nuevo. La ciudad es chica,
no hay tanto turista ni tanto quilombo, me encuentro un argento vendiendo
empanadas en una cucha que alquilaba a medias con unos colombianos. Lo extraño
es que las empanadas las importaba congeladas de Inglaterra.
El río Lifey, que divide Dublin |
Pasajes interiores peatonales, con bares recónditos y la infaltable Guiness |
En la
foto siguiente se observa una aguja, de unos 120 metros de alto, que es un
Monumento homenaje al Almirante Nelson. Es totalmente de acero inoxidable
Al fondo, una aguja de acero inoxidable de unos 120 metros. Pleno centro de Dublin |
La ciudad
es tranquila, agradable y turísticamente potable. Te llevan a recorrer los
lugares emblemáticos, y es la Irlanda perteneciente a la CEE, no como Irlanda
del Norte que pertenece al Reino Unido.
Tipica construccion |
Construcion en piedra |
Uno de
los orgullos de Dublín es el Trinity College, desprendimiento del Trinity
College Británico, fundado por la Reina de Inglaterra, antes de su división
política. Hay varios Trinity College, uno de ellos en Oxford, además de este en
Dublín
Oscar Wilde, cerca del Trinity College |
De Dublin fue exilado por homosexual, actualmente se lo reinvindica. Mas arriba, está la foto de su sepultura en París, donde murio exilado. |
Estatua de Molly Malone, personaje histórico que vendía mariscos en su carro |
Construccion típica, el ladrillos vista |
Catedral de San Patricio, gracias a la cual acá se escabian mal todos los años para su cumpleaños |
Por si te querés ir a una misa |
Tulipanes en un parque cualquiera de Dublin |
Seguía el frío. Los parques allá estan cercados desde tiempos inmemoriales, y los cierran de noche. |
Tipica construccion |
Puente similar al de Puerto Madero, en una zona igua a Puerto Madero |
Estatua del Almirante Guillermo Brawn, Irlandés de origen |
Placa al pie del monumento del Almirante Brown |
¿No podrían ser así nuestros Metrobus? |
Argento vendedor de empanadas...inglesas |
Monumento al trabajador portuario |
Ultima foto con la cámara que se me destrozó instantes después pues el viento tiró el tripode |
Luego de
destrozarse la cámara de fotos, compré una de urgencia a unos 50 euros, pues
estaba promediando el viaje y lo único que salve de la cámara anterior fue la
tarjeta SD y las fotos. Estreno cámara y continúo el periplo luego de la breve
estadía en Dublín en Belfast, unos 170 kilómetros al norte, vía terrestre en
tren, donde pasaría mis próximos tres días.
BELFAST
BELFAST
Belfast
convive con el sino trágico de su lucha por la independencia, el IRA y la
construcción y posterior hundimiento del Titanic. No es muy turística, si bien
no hay problemas de ninguna índole actualmente con el IRA y menos, con el
turista.
Estación de tren al llegar a Belfast |
B&B en Belfast, buen lugar. Me hace acordar a...Belfast |
Como
ciudad es más antigua que Dublín, mas tirando a Londres, por supuesto menos
superpoblada e infinitamente más chica. Buen transporte público. El citytur es
relativamente corto y te lleva por los lugares más destacados. Tienen un
párrafo destacado para todo lo que fue el martirio de los Irlandeses en la
guerra con el IRA, e inclusive, hay una zona de la Ciudad que ha quedado como
una suerte de Gheto, pero por supuesto más bien psicológico ya que no hay ni
vigilancia militar ni impedimentos de circulación. Han preservado un muro
metálico donde hay murales conmemorativos a los muertos, como se hizo acá con
los muertos en Cromañon, pero mucho más importante y mejor cuidado
artísticamente. Probablemente, a los ingleses esto les rompa las pelotas, pero
los irlandeses del norte, pertenecientes al Reino Unido, no les van a permitir
sacarlo nunca.
Ganso en clara actitud de chorearme un sánguche de miga. Así no se trata a los turistas |
El pez de la vida, tapizado con cerámicos con diversas leyendas, fotos y dibujos |
Esquema de las dimensiones del Titanic en escala, de tipo escultura. |
Vestuario original de Di Caprio en la pelicula, Museo Titanic, Belfast |
Vestuario original de Kate Winslet enla película, Museo Titanic, Belfast |
Cartel en el acceso al dique seco y sala de bombas de agua que lo inundaban o drenaban. |
Una bella
ciudad, chica y con enormes parques muy bien cuidados. El respeto por lo
público, ya lo mencioné, es destacable. Los parques tienen flores y gente que
la cuida. Deben ser los beneficios de tener ciudades centenarias, donde sus habitantes
aprenden a amar a sus bienes públicos y su estética propia. Las afueras de la
ciudad son semidesérticas, la gente anda en auto más que a pie. O en bicicleta.
La estadía fue breve y satisfactoria, y ya preparo mi retorno París por vía
aérea, donde llegaré de noche lo cual me preocupa un tanto pues ya no tengo más
reservas de hoteles y voy al revoleo, ya que partiré cuanto antes para Cannes,
Niza y Mónaco, y vuelta a París para el regreso a Baires.
Parlamento en Belfast |
AEROPUERTO
GEORGE BEST, HEATHROW Y POR FIN ORLY
Llego con
mi paranoia habitual unas dos horas antes a la terminal del bondi que me
llevará al aeropuerto, para llegar 4 horas antes de la salida del avión hacia
la escala en Londres y dos horas después hacia Orly, París. Acostumbrado a las
cancelaciones y peripecias propias de Argentina, aún dos semanas después de
estar en Europa, no me acostumbro a que todo salga como está previsto. De
hecho, llega a ser aburrido y uno llega a la locura de extrañar un buen
intercambio de puteadas con algún empleado en un mostrador, porque algo salió
mal.
Con todo ese tiempo disponible, y con la laptop encima, pago los 6 Euros de la conexión de Internet por Wi Fi y me veo dos (2) películas por Cuévano.
Finalmente, sale el avión y hace su escala en Heathrow de dos horitas, suficientes para almorzar y recorrer el Aeropuerto más parecido a un Shopping que he visto. Es todo Free Shop, obviamente en Libras, con lo cual hasta comprar chicles es inviable, pero no deja de ser pintoresco. Todo está hecho en función de venderte algo mientras esperás tu avión. Hay más empleados en los negocios que en los servicios del Aeropuerto. Linda experiencia, impresionante flujo de gente e imposible de llevarse una real dimensión del mismo, ya que decir que es gigante parece chico.
Salgo finalmente a París, esta vez a Orly, el segundo aeropuerto de París, donde llego cerca de las 10 de la noche, y ya acostumbrado, sigo al rebaño para terminar a unas cuadras de Champs Elysees ya rayando la medianoche y si lugar para apoliyar, cuando me encuentro (o mejor dicho escucho) tres mujeres con lenguaje Rioplatense, que me entero son Uruguayas y les pregunto donde están parando y si era muy caro. Era caro, pero a esa hora no me iba a poner a buscar lugar, pagué 120 euros la noche (venía promediando menos de la mitad), pero podía apoliyar y revolear el equipaje hasta poder rajarme por tren hacia el Sur de Francia. Decido tomar la habitación por esa noche e inmediatamente de revoleado el equipaje, salgo a comprar fasos. Ahí pude apreciar que París, de noche, no difiere mucho de Buenos Aires. Gente apoliyando con cartones, colchonetas, pibes y perros en las puertas de los negocios. Cero presencia policial, pero no parece inseguro, parece una calle cualquiera de Buenos Aires, a 50 metros de Champs Elysees. Me cruzo con unos trolos que se andan besuqueando como adolescentes, resisto la náusea correspondiente y consigo finalmente los fasos. Y me vuelvo a apoliyar que mañana el día será largo.
RUMBO A CANNES, NIZA Y MONACO.
Con todo ese tiempo disponible, y con la laptop encima, pago los 6 Euros de la conexión de Internet por Wi Fi y me veo dos (2) películas por Cuévano.
Finalmente, sale el avión y hace su escala en Heathrow de dos horitas, suficientes para almorzar y recorrer el Aeropuerto más parecido a un Shopping que he visto. Es todo Free Shop, obviamente en Libras, con lo cual hasta comprar chicles es inviable, pero no deja de ser pintoresco. Todo está hecho en función de venderte algo mientras esperás tu avión. Hay más empleados en los negocios que en los servicios del Aeropuerto. Linda experiencia, impresionante flujo de gente e imposible de llevarse una real dimensión del mismo, ya que decir que es gigante parece chico.
Salgo finalmente a París, esta vez a Orly, el segundo aeropuerto de París, donde llego cerca de las 10 de la noche, y ya acostumbrado, sigo al rebaño para terminar a unas cuadras de Champs Elysees ya rayando la medianoche y si lugar para apoliyar, cuando me encuentro (o mejor dicho escucho) tres mujeres con lenguaje Rioplatense, que me entero son Uruguayas y les pregunto donde están parando y si era muy caro. Era caro, pero a esa hora no me iba a poner a buscar lugar, pagué 120 euros la noche (venía promediando menos de la mitad), pero podía apoliyar y revolear el equipaje hasta poder rajarme por tren hacia el Sur de Francia. Decido tomar la habitación por esa noche e inmediatamente de revoleado el equipaje, salgo a comprar fasos. Ahí pude apreciar que París, de noche, no difiere mucho de Buenos Aires. Gente apoliyando con cartones, colchonetas, pibes y perros en las puertas de los negocios. Cero presencia policial, pero no parece inseguro, parece una calle cualquiera de Buenos Aires, a 50 metros de Champs Elysees. Me cruzo con unos trolos que se andan besuqueando como adolescentes, resisto la náusea correspondiente y consigo finalmente los fasos. Y me vuelvo a apoliyar que mañana el día será largo.
RUMBO A CANNES, NIZA Y MONACO.
Temprano en Gare de Lyon, para tomar el tren |
Trenes rumbo al sur, del SNCF |
Salgo en
el SNCF desde Gare de Lyon, primera parada será Cannes. Un tren espectacular.
Eso sí, me da un poco de cagazo dejar mis cosas en el compartimiento de
equipaje, al lado de la puerta e irme a sentar, pero, siguiendo al rebaño, veo
que todos lo dejan y se desentienden. Decido hacer lo mismo. A esta altura,
solo me afanarán ropa sucia, ya que el vento, pasaporte y otras huevadas van
conmigo encima.
Llegada a Cannes |
Lugar donde se hizo el Festival de Cine, en pleno desarme |
Llego a Cannes a las 5 horas y pico de tren, un día de lo mas choto, lluvia torrencial, así que a buscar refugio sin muchas exigencias. Termino en un hotel frente a la estación donde bajé, por 30 euros la noche. Eso sí, la habitación sin baño, sin TV y sin toallas. Igual era solo para pasar la noche. Salgo a recorrer la ciudad, que está en pleno desarme del Festival de Cine de Cannes. Hace una semana estaba en este mismo lugar toda la creme de la creme del cine, hoy no queda ni el loro más que las fotos y los emblemáticos hoteles adornados para la ocasión. Se empieza a notar un lujo fuera de lo común, no hay autos pedorros. Tiene un aire a Mar del Plata, mucho mejor cuidada y sin negrada por las calles. El puerto lleno de yates que te caés de culo, muchos árabes, mucha mina gato viejo en semibolas y producidas como para salir en la tele, del bracete de viejos chotos con mucha guita. La Ciudad -el centro- no escapa al común denominador de Francia. Todo funciona, mucha obra pública, limpieza y absolutamente carísimo todo. Yo sigo con mi dieta frugal, y ya lo noto en el cinturón, que cada día aprieto más. Decí que llevé uno de esos cinturones de correa sin agujeros, marineros, que los cerras como se te canta. Me asombró a playa, es de arena gruesa.
Los hoteles de 5 estrellas tienen todos más de 50/70 años de antigüedad y el casino está a la orden del día. Eso sí, están los nigerianos con los paraguas vendiendo anillitos y aritos como en Buenos Aires. A todo esto, cumplo mi ritual de enviar postales de cada ciudad que visito, como vengo haciendo desde que llegué a Europa, a dos euros el franqueo por avión.
Sigue el frío, en plena costanera de Cannes |
Hotel Carlton de Cannes |
Playas de arena gruesa, y limpia. El agua, es el Mediterráneo, o sea la Cote de Azur |
Niza no difiere mucho de Cannes en su estructura, una ciudad balnearia pero que tiene habitantes todo el año. A pesar de estar más al sur y en la playa, el clima no mejora, Sigue haciendo frio, y ya es junio Mucho espacio abierto, no hay plazas destacables con plantas, salvo las infaltables palmeras en la costanera
La arena de Niza no es gruesa, es canto rodado, imposible de caminar sin
calzado. La visita es rápida, solo un día, con lo cual solo atino a recorrer
una pasarela que me lleva a un Cementerio, bien cuidado. Es un cementerio tipo
pueblo, chico y sin gente, pese a ser horario de visita. En todos los
cementerios tienen lugares reservados para los que murieron en las dos
guerras. Si bien Francia casi no fue tocada, y en particular el sur de
Francia, no fue invadida por los alemanes, no dejan de tener las secuelas de la
guerra en todo el país.
Niza, con sus playas de canto rodado |
Me voy preparando para mi última escala en Mónaco, donde pasaré un día ya pego la vuelta para mis últimos días en París, y de allí, a Buenos Aires.
MONACO
Llego a la estación del tren en Mónaco y ya me encuentro con que Mónaco y Monte Carlo son dos cosas distintas. Para un lado de la vía es Mónaco y para el otro, Montecarlo. Me mando para el lado donde las escaleras bajan desde la Gare de Mónaco, y luego de bajar por escaleras unos 40 metros, me encuentro pasando por al lado de la iglesia de Saint Devote, famosa por la carrera de Fórmula uno, en que es permanentemente mencionada. Una iglesia chiquita y pintoresca.
Recordatorio a Ayrton Senna |
Saint Devote |
Saint Devote, a unos 50 metros de la calle donde se corre la F1 |
Montecarlo es, en sí mismo, una lujuria de exceso de todo. Todo es lujo y ocio. Debe ser uno de los lugares con más gente al pedo del planeta
Sakida de Boxes |
Largada de la F1, aun marcada en el asfalto, como asi tambien las posiciones de los autos |
Pole position y línea de llegada |
Estatua del Chueco Fangio |
Recordatorio de Mercedes Benz a Fangio |
El túnel de Monte Carlo, pasa bajo un hotel. |
Casino de Montecarlo |
Terraza al costado del Casino |
Playa de Montecarlo |
La foto
anterior es una de las pocas que me saqué en remera, pues haría unos 25°, el
resto del viaje hizo frío. Una primavera europea fría realmente.
La ciudad es muy bonita, limpia y pintoresca, por lo que pude apreciar en mi único día de visita. Ya por la tarde, me pego la vuelta a París para mis últimos días allí y posterior regreso a Buenos Aires.
En el Tren de regreso me encuentro con un matrimonio de una Argentina y un francés, que vivían allá. Obviamente, aprovechamos el idioma común para putear al gobierno durante las casi 7 horas que tomó el regreso, transbordo incluido.
Llego a Gare de Lyon cerca de las 23:30, con la preocupación de no saber si el subte funcionaba a esa hora, pero esta gente me avisó que el subte funcionaba hasta la una de la mañana. Igual, llegué a tomar el último subte hacia mi destino parisino, con riesgo de perder la reserva que había hecho por Booking.
La ciudad es muy bonita, limpia y pintoresca, por lo que pude apreciar en mi único día de visita. Ya por la tarde, me pego la vuelta a París para mis últimos días allí y posterior regreso a Buenos Aires.
En el Tren de regreso me encuentro con un matrimonio de una Argentina y un francés, que vivían allá. Obviamente, aprovechamos el idioma común para putear al gobierno durante las casi 7 horas que tomó el regreso, transbordo incluido.
Llego a Gare de Lyon cerca de las 23:30, con la preocupación de no saber si el subte funcionaba a esa hora, pero esta gente me avisó que el subte funcionaba hasta la una de la mañana. Igual, llegué a tomar el último subte hacia mi destino parisino, con riesgo de perder la reserva que había hecho por Booking.
Preocupación de los parisinos por la inmundicia de los perros, alla también es un proble,a |
Obviamente, llegué a mi destino en el subte, pero al igual que en Buenos Aires, las calles no tienen nombre. Arranqué al revés, la cuestión es que estuve dos horas dando vueltas para encontrar el hotel. Dos horitas con todo el equipaje y bajo la lluvia. Finalmente, gracias a mis conocimientos y orientación de Boy Scout retirado, llegué.
Estaba repodrido del viajo, mojado hasta los huesos y puteando al intendente de París como si fuera Macri, porque encontré la calle de casualidad. A esa hora no había un solo lugar abierto donde conectarme al Google Maps ni siquiera gente para preguntar.
Ni bien tomé la habitación (este era un tres estrellas , aprovechando los últimos Euros baratos de Cristina), me apoliyé como un bendito y por primera vez me levanté después de las 10 de la mañana.
De Gaulle y su monumento |
De día, las cosas se ven distintas, y ya con sol, salí a buscar mi Café au Lait baratieri (en el hotel el "petite dejeuner" costaba 12 Euros, con lo que yo fumaba y comía todo el día. Y dedique el resto de los días a cumplir algunos encargues de mis hijas, a comprar algún presenta para mi hermana que me cuidó la perra y alguna huevada para quienes fueron mis benefactores económicos en el viaje.
Ultima foto desde las afueras de Paris |
Esos
cuatro últimos días se me hicieron de chicle, recorría de nuevo lugares ya
visitados y no fui a nuevos porque ya no quería ni sacar fotos -llega un punto
que te repudrís de sacar fotos o pedir que te saquen- y para colmo de males, el
domingo es un día TOTALMENTE MUERTO en París. Hasta las Galerías Lafayette
cierran. Fue embolante y medio que me vino un bajón anímico, que luego descubrí
que era hambre, porque pasé tanto tiempo ese domingo buscando un lugar abierto
para comprar fasos que no había comido nada desde hacía casi 24 horas.
Pero como todo, llegó el retorno. Llegada más que holgada en tres y transfer al Charles De Gaulle, me vi una película por cuevana, llegó la hora del embarque y última vez que me ponía en bolas para subir a un avión (es realmente molesto esto, deberían dejar subir a los de Al Qaeda y no joder tanto a los pasajeros). Escala en San Pablo, tan choto el aeropuerto como hacía tres semanas atrás -y en vísperas del mundial- y en un rato mas, AEROPARQUE, pido un remis y se van todos al carajo, y en 15 minutos estaba en Caballito, Mi Buenos Aires Querido, y en casita.
Fin de la aventura, tal vez irrepetible e impagable hacia quienes me dieron esa gran mano. Una experiencia inolvidable, ojalá alguna vez la pueda repetir.
Eso sí, no viajo más solo. Es un embole. Y a los de las líneas aéreas, a ver su se ponen media pila y hacen más espacio entre los asientos, que viajar 10 horas con las rodillas bajo el mentón es una tortura. Putooos!!!
Hasta la próxima.
Pero como todo, llegó el retorno. Llegada más que holgada en tres y transfer al Charles De Gaulle, me vi una película por cuevana, llegó la hora del embarque y última vez que me ponía en bolas para subir a un avión (es realmente molesto esto, deberían dejar subir a los de Al Qaeda y no joder tanto a los pasajeros). Escala en San Pablo, tan choto el aeropuerto como hacía tres semanas atrás -y en vísperas del mundial- y en un rato mas, AEROPARQUE, pido un remis y se van todos al carajo, y en 15 minutos estaba en Caballito, Mi Buenos Aires Querido, y en casita.
Fin de la aventura, tal vez irrepetible e impagable hacia quienes me dieron esa gran mano. Una experiencia inolvidable, ojalá alguna vez la pueda repetir.
Eso sí, no viajo más solo. Es un embole. Y a los de las líneas aéreas, a ver su se ponen media pila y hacen más espacio entre los asientos, que viajar 10 horas con las rodillas bajo el mentón es una tortura. Putooos!!!
Hasta la próxima.